dijous, 4 de juliol del 2013

Éssers anhelants



Morandi 1947


"El ser humano también se ha acostumbrado a sentir melancolía de lo que no llega, de lo que no conoce. Continuamente está esperando un mundo mejor, un mundo superior, una dimensión más elevada. Eso nos hace nostálgicos del futuro. Y nos causa una extraordinaria desazón. No estamos dotados para vivir en el presente ni para vivir el presente. Somos seres anhelantes."

"Cuando escuchamos música profundamente no sabemos en qué lugar y en qué tiempo estamos. En cierto sentido, desaparecemos en la música. Y eso es lo maravilloso."

"El buen gusto es algo siempre discutible, por la subjetividad que comporta. En cualquier caso, está sujeto a la mentalidad de cada época. Lo que hoy nos puede parecer recargado, en tiempos del barroco era una respuesta para llenar el vacío, el vacío existencial. Las generaciones futuras rechazarán cosas que hoy juzgamos como buenas o válidas estéticamente. De todos modos, si hay que hablar de buen gusto vemos que a lo largo del tiempo este concepto está muy relacionado con las formas austeras, con las líneas limpias, nunca excesivas. Creo que fue Auden quien dijo que la belleza era la máxima precisión de la forma; algo parecido podemos señalar cuando hablamos de buen gusto. En música, por supuesto, se han escrito ríos de tinta al respecto. Podemos decir que la música escrita o tocada con buen gusto es aquella que llega nítida al oyente, la que suena de manera natural, sin que el lenguaje se pierda en divagaciones ni caminos sin retorno. Tuve la suerte de conocer a Jorge Oteiza, y no olvido un comentario suyo en que me decía que, para conseguir una obra plena, hay que quitarle todos los elementos superfluos, depurarla al infinito, desnudarla al límite hasta que, de quitar uno más de esos elementos, la estructura amenace con venirse abajo. Esto quizá pueda parecer exagerado, porque a veces la ornamentación, como bien se ve en el repertorio musical de los siglos XVII y XVIII, formaba parte del discurso, y nadie puede dudar que dichas fioriture eran a menudo enormemente refinadas y ayudaban a completar la intención definitiva de una creación. Visto todo ello, yo diría que el buen gusto es tener un agudo sentido de lo esencial."

"Ante la cuestión de dónde surgen los cánones estéticos hay que afirmar que parten del trabajo de los artistas, de la necesidad innata de la mente humana impelida a perfeccionar más y más la forma. Es algo que está en nuestra estructura cerebral."

"El arte, la música, no únicamente evolucionan por cuestiones sociales, sino por ese continuo y obsesivo pensar la forma."

"No cantamos en colectividad porque estamos empachados de ego. En el fondo, no hacemos nada en colectividad."

"Somos un espacio privado absolutamente cerrado con baldones para que no entre nada. La paradoja es que queremos participar de cosas colectivas siendo nosotros unas unidades cerradas y autorreferenciales. Así, es normal que vivamos en este solipsismo y en esta soledad tan absolutamente tétrica."


Ramón Andrés (a Nativa.cat)

(els subratllats són nostres)